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5 de abril, la resurrección del Perú

Publicado: 2015-04-05

Que hoy sea Pascua de Resurrección me parece irónico, pero a la vez le da un sabor importante a los hechos que hemos vivido como país. Aprovecho la ocasión, si bien este es un post político, para saludar a todos los creyentes y regodearme en la idiotez de los no creyentes que siempre están más pendientes de Dios que los “piadosos”.

He visto como varios animalitos de evidentes tintes rojos y sus amigotes libertinos –según ellos liberales-, pues aunque les arda los extremos se tocan, hablan de lo que fue el Autogolpe de 1992 con un desparpajo y odio que los consumirá. Lo interesante es que se computan los abanderados de la democracia, el respeto a los DDHH y la tolerancia. Me resulta una broma de muy mal gusto porque están a favor de la Inquisición Rosa, del aborto, de soltar terrucos –eso solo los rojitos vale decir- y de defender lo indefendible. Muy democráticos, ¿no? ¡Listos para vivir en una sociedad de verdadera armonía y paz! Por si acaso, es SARCASMO.

Me resulta una bufonada que hayan algunos “opinólogos” que dicen que vivieron las atrocidades de los últimos 40 años y solo remarcan lo malo que hizo el Estado y sus gobernantes, pero ni de chiste mencionan a Sendero Luminoso, al MRTA, a los sindicalistas de izquierda ni a los partidos comunistas que solo se dedican a sangrar al Perú en todo sentido. Claro que eso no exime a los demás de sus porquerías. Igual nunca he estado a favor de la MEMORIA SELECTIVA.

Pongamos el 5 de abril en la perspectiva correcta:

1. La mayoría de derechos civiles que gozamos los luchó el APRA de Haya de la Torre y otros tanto los dio un DICTADOR, como lo fue Manuel Odría. A mi juicio, Odría es el mejor gobernante que hemos tenido, porque todas sus obras han perdurado, más allá de las porquerías que también hizo. Lean historia, no pequen de ignorantes.

2. El Perú se jodió durante la porquería de gobierno de Velasco. Sí, ese a quienes aman los amigotes de Ollanta. Su maldito pensamiento militar de izquierda indigenista mató al país social, económica y políticamente. Cada vez que hablo con alguien que vivió en esa época, salvo que se haya visto beneficiado por el régimen, maldicen a Velasco y lloran el nacimiento de todos los males económicos del país, la pérdida de libertades y el fortalecimiento del frenesí “revolucionario”. Ciertamente fue así, y debemos recalcar que se llegó al límite de la imbecilidad al imponer un uniforme escolar asqueroso y decir que los regalos de Navidad los traía Túpac Amaru. Claro que lo peor fueron sus repercusiones y el frágil balance de poder que dejó su paso por el poder.

3. La inflación que tanto le achacan a Alan creció en la época de Belaunde. El Inti que le achacan a Alan, nació en la época de Belaunde. El terrorismo –su peor cara- creció en el gobierno de Belaunde y si mal no recuerdo, les llamaron un grupo de abigeos cuando comenzaron sus atrocidades. Clásico gobierno de centro post dictadura, minimizaron todos los problemas porque no tenían los pantalones para tomar las medidas radicales que se necesitaban.

4. El punto 2 y 3 son la única explicación de que el discurso demagogo y bastante velasquista de Alan –porque fue más velasquista que aprista- ganara abrumadoramente. Era un discurso de cambio radical ciertamente, pero imbuido en la inercia de la debacle militarista. Todos querían ser del partido que ahora repudian. Ya nadie se acuerda, eran los “ímpetus de la juventud”...

Alan ciertamente hizo estupideces que ayudaron a intensificar todo lo malo. No tuvo pensamiento estratégico alguno. No era un estadista. Fue un buen florero. Estaba pesimamente asesorado. El país se terminó por ir por el drenaje.

5. Ambos presidentes cometieron sendos errores, pero al ver los tiempos y lo podrido que estaba nuestro Perú: lleno de empresarios abusivos, de una clase política que comenzaba a descomponerse a la basura de hoy, con comunistas fregando y siendo sanguijuelas que de una u otra manera vivían del estado –ahora les llamamos héroes a sindicalistas y gentuza que solo se dedicaba a joder, tienen que tener su placita, ¿no?-. ¿Qué hubieran hecho Uds.?

6. Vargas Llosa, bueno, él se presentaba como la solución. Mucha gente lo creyó a así, en especial por sus credenciales de demócrata de derecha que “conocía la realidad nacional”. Gracioso ciertamente, pues la mayor parte de su vida ha estado en el extranjero y todos se olvidaron que había sido izquierdista. La verdad, me alegra que no haya sido Presidente, seguiríamos jodidos. Ahora, bueno, él entra perfectamente en la descripción de un caviar: vive bien, no ayuda a nadie, tiene tintes liberales, pero su corazoncito es rojo. Todo ello explica que endose su “valía” al peor presidente de los últimos 40 años: Ollanta Humala. O a Nadine, igual es.

7. Fujimori recibió el país hecho un desastre. Terrorismo, hiperinflación, sin industria, sin poder ser sujeto de crédito internacional y con la clase política fregando siempre. De estos últimos, unos estaban ardidos porque su “hidalgo” no había ganado, otros por acomodarse y tantos porque eran “rábanos” y siempre se han dedicado a ello. Querían sacarlo por incapacidad moral, ¿por qué no hacemos eso con Ollanta y dejamos de hacer escándalos con la censura a los ministros?

Todas la medidas que tomó Fujimori, a la postre, recordando lo que se vivía, fueron las correctas. No puedo decir que las mejores y/o las buenas “moralmente” porque tuvieron más de una repercusión negativa. Sin embargo, de no haberse dado viviríamos como en Venezuela, Cuba o Corea del Norte; cantaríamos “la Internacional” por fuerza mayor y Abimael sería el sumo protector del Perú. ¿Quisieran estar en ese país? YO NO.

Las libertades de las que todos disfrutamos las ampara la Constitución del 93. Constitución que recoge varias cositas de las que mencioné en el punto 1 y agrega otras tantas de buen calibre. Es triste que sea la Constitución más ninguneada y maltraída, cuando es la segunda con mayor vigencia y la que mejores resultados ha abrigado.

La bonanza económica se la debemos en alguna medida a Fujimori. Los correctos gobiernos de Toledo y Alan –pese a todas las porquerías de las que no están exentos- siguieron lo que impuso “el dictador oriental”. Punzante, ¿no? ¿Por qué será? Y me atrevo a responder: PORQUE FUNCIONÓ.

8. Por otra parte, no puedo dejar de decir que Fujimori la fregó con ganas, que está preso por las malas cosas que hizo y que no debería salir libre. No voy a discutir que nuestros otros expresidentes lo deberían acompañar. Pero, más que cualquiera de ellos, Ollanta y toda su banda deberían recibir cadena perpetua por hacer que el país ande como el cangrejo, por todos los actos de corrupción probados y sus medidas que transitan el límite entre el autoritarismo y la democracia –a la que utiliza como escudo para joder-.

Ahora bien, hay otras tantas cosas que le imputan a Fujimori, como ser un genocida o asesino, que son risibles y que deberían chantárselas a tanto malnacido terrorista que ahora pinta murales y hacen muestras de arte contemporáneo. Gentuza a los que, ahora, nos vemos obligados a soltarlos y pagarles indemnizaciones por cuestiones de Derechos Humanos -¡qué tal concha!-.

No voy a negar las tristes muertes de gente inocente en la lucha antisubversiva, pero de ahí a ser abusivos e injustos: NO. Nos estamos acostumbrando a bailar al son de los rojitos y caviares, con sus malditas ONG, que persiguen con saña a quienes nos aseguraron poder vivir con tranquilidad. Tranquilidad que se está yendo al demonio, en especial, por las cosas hechas en este gobierno.

Solo una invocación final: antes de opinar lean historia -varias fuentes-, recuerden como sobrevivían antes y cómo viven ahora, y proyecten como vamos a vivir si siguen dándole el poder a patanes corruptos como Ollanta o a rateros-vagos como Villarán. Esto tampoco es para aplaudir a Fujimori, Toledo, Alan u otros tantos, pero hay que agradecerles lo bueno que hicieron por el país, no olvidarlo por odios e intereses y/o sus malas acciones. Aprendamos a ser justos.


Escrito por

Carlos Daniel

Administrador de Empresas. Especialista en proyectos para el desarrollo. Escritor y compositor.


Publicado en

Consenso Ilusorio

Espacio de política. No me caso con nadie.