#ElPerúQueQueremos

Mafalda 10, tira 1840

¡Y anduve con unas caras, pobre!

Elecciones

Para que el mal triunfe basta con que los hombres de bien se queden cruzados de brazos.

Edmund Burke

Publicado: 2014-10-03

Aquella frase no puede llevar más verdad. Es tan simple y directa que no hay forma de refutarla. Al ver al Perú, las provincias y la capital por igual, temo por el futuro. Muchos brazos capaces siguen cruzados y las posturas malsanas son las que corren con soltura. Están creando brechas insalvables que se amparan en preceptos marchitos y fracasados. Lo más triste es que se presten oídos a sus expositores, que son gente con mala preparación y criterio deformado.

Digo ello también, porque he regresado de un viaje de investigación en provincias y como es cierto que ha habido mucho abuso de empresas inescrupulosas, también es cierto que mucho es propaganda de gente que solo quiere destruir para implantar sus ideas carentes de lógica.

¿Cómo se produce algo de la nada? Es un misterio que sigo pensado tras haber hablado con algunos dirigentes que no quieren ningún tipo de empresa (no solo las extractivas), pero que quieren que “papá gobierno” les dé dinero. Peor aún, esos dirigentes cuando llegan al poder solo se dedican a robar, beneficiar a sus allegados, y echarle la culpa de sus fracasos y trastadas a terceros. ¡Parece que mancillar la confianza de los pueblos se ha convertido en deporte!

Las autoridades competentes también tienen mucha culpa. Los filtros pre-electorales son muy fáciles de sortear. Las vallas son muy bajas en nombre de la libertad y el derecho de todos a ser elegidos (¡Vaya casualidad!). No tendría problema con ello si la gran mayoría de gente tuviera educación post-escolar y que al menos nuestros egresados de los colegios entendieran lo que leen.

Que durante tanto tiempo se haya pervertido el verdadero significado y naturaleza de la educación ha traído mucha pobreza intelectual y menor resistencia a malos manejos (¡gracias SUTEP y otros similares! - por si acaso, es sarcasmo)

¿Qué objetividad puede tener alguien que solo se dedica a tirar agua para su molino y no ve más allá? ¿Qué puede saber de desarrollo e inversiones alguien que nunca ha trabajado? ¿Qué mejoras y obras puede promover? ¿Qué criterio puede pedírsele una persona sin educación? ¿Qué resultados se le pueden exigir? Sé que estos puntos hablan de males endémicos y multidimensionales, todos herencia de las idas y vueltas que ha tenido el país, pero no por ello debemos seguir cometiendo los mismos errores.

Yo estoy a favor de que todos nos expresemos, es lo ideal en un mundo civilizado, pero no por eso vamos a jugar con nuestras vidas. La democracia debe protegerse a sí misma, no promover ni honrar lo que la socava. La república tiene que tener formas de luchar contra todo lo que atente contra ella. Claro está que con instituciones débiles y con leyes ilógicas jamás estará segura (en especial si la mayor cantidad de beneficios que otorgan éstas los disfrutan los delincuentes de toda clase). Debemos velar por ello, todos. Podrá parecer ridículo, pero iniciando con acciones pequeñas, cambiando nuestras respuestas a determinadas situaciones y sumando a otros se puede conseguir mucho con el tiempo. Hacernos de la vista gorda no consigue nada. Hasta cierto punto, suena a Libertad de Mafalda diciendo: "Una pulga no puede picar a una locomotora, pero puede llenar de ronchas al maquinista.".

Respecto a que la democracia se proteja, ¿cómo es posible que gente procesada por delitos de corrupción y otros pueda seguir postulando o ejerciendo algún cargo? Es absurdo, suficiente es que tengan esas culpas para ser descalificados en todo sentido ¡Bueno fuera que en un juicio imparcial salieran absueltos! Son peligros andantes, ni más ni menos. Cabe recalcar que salvo de esta crítica a quienes son injustamente perseguidos por cuestiones políticas y juegos de poder, pues en el Perú es usual que hayan cacerías de brujas.

Una máxima que debemos recordar es: "si en lo poco no son fieles ni correctos, en lo mucho nunca lo serán". En eso radica la importancia de que toda persona que se presenta a una elección sea espulgada a detalle, incluso, pasar pruebas psicológicas.

Como sociedad debemos exigir que solo los mejores se presenten. Gente proba, con trayectorias limpias, con estudios y con experiencia. Es como en un trabajo cualquiera. Si pasamos todas las pruebas bien, si laboramos bien y no cometemos faltas a la moral y etc., podremos conseguir y mantener nuestros puestos hasta ascender. Si somos malos o caemos en infracciones nos retiran rápidamente. ¿Por qué no podemos hacer lo mismo con nuestros representantes a todo nivel? ¿Por qué no podemos exigir que los partidos políticos sean instituciones coherentes y estructuradas, y no alianzas temporales para hacerse de votos? ¿Por qué no podemos reclamar formación de cuadros? ¿Por qué la cultura chicha y/o criolla, la del vivo “bacancito”, tiene que ser la sangre de nuestra convivencia?


Escrito por

Carlos Daniel

Administrador de Empresas. Especialista en proyectos para el desarrollo. Escritor y compositor.


Publicado en

Consenso Ilusorio

Espacio de política. No me caso con nadie.